MAMÁ,
TÍA Y ABUELA
Hace ya algunos años, que cuando llega
Diciembre, le dedico un par de horas a sentarme, pensar en el año que termina y
agradecer.
Me la paso todo el año observando y
analizando minuciosamente a la gente que me rodea. Naturalmente, me gusta
observar, no para juzgar sino para aprender de los demás.
Pero cuando llega el fin de año, me toca
hacer un poco de introspección. Me toca mirar para adentro y pensar como fui yo
este año, en que crecí, en que aprendí y en que me equivoqué, etc.
Y MARAVILLOSAMENTE, entre muchas otras
cosas, encuentro siempre un motivo diferente para agradecerle a la vida. En esta
ocasión hubo algo en particular que no dejaba de rebotar en mi cabecita. En
este día, quiero agradecer: Estar hecha como resultado de la influencia directa
de tres maravillosas mujeres que son ejemplos y guías en mi vida.
Día a día aprendo de ellas, las observo
de cerca y de lejos, las escucho, les consulto.
Y no importa cuantas veces en el año
disfrute de su compañía, porque más allá de las distancias de nuestras vidas
ocupadas y de los desencuentros, las llevo conmigo en el espíritu y en la
sangre.
Y claro! Me refiero a ustedes: Mimo,
Sandra y Ariela.
Me escucho repitiendo sus palabras,
imitando sus gestos, sus acciones.
MIMO:
Quien nos enseña que TODO es posible en
la vida si ponemos la cabeza en ello. Que el trabajo, el esfuerzo y la
constancia son esenciales para cualquier meta que nos propongamos. Es el
ejemplo de la fuerza, la resistencia. Ella consigue todo lo que quiere, pero
por sobre todo, deja huellas en el camino. Nos enseña que no importa qué
hagamos, tiene que estar hecho desde el corazón, con amor. Nos muestra lo que
es la empatía, ayudar, compartir, ella es una LEONA. Una excepción a la regla, ÚNICA EN SU ESPECIE.
ARIELA:
Es el cable a tierra, el ejemplo de cómo todo
en la vida tiene solución, ejemplo de que la constancia nos trae paz mental.
Ella se organiza de manera impecable para encontrar momentos genuinos en sus
días en donde se concentra y disfruta lo que está haciendo al 100%. Dedica
tiempo a su familia, sus amigos, sin perder ningún detalle. Nos demuestra e
inspira a tener una vida en la que la rutina no tiene connotación negativa,
sino que es algo admirable, en donde uno puede encontrarse estando tranquilo,
con paz, con la mente consciente y enfocado. Y aunque crea que no, lo que nos
inspira es que todo está bajo control, que todo va a estar bien si evitamos
desesperarnos por detalles. Nos señala qué es lo importante en la vida. Es la
representante del EQUILIBRIO, ÚNICA
EN SU ESPECIE.
SANDRA:
Nos trae magia, nos trae esperanza, la
ilusión de que todavía somos chicos, y a veces no importan las reglas, no
importa el contexto, sino solo esos momentos que disfrutamos al 100% y nos
reímos a carcajadas. Ella, su excentricidad, su alegría contagiosa, el ejemplo
perfecto de los extremos, de los cuales uno siempre disfruta riéndose, Un show
constante, una vida llena de EMOCIONES,
siempre apuntada a lo sentimental. Sensible, frágil, la más cariñosa, el lado
cálido de la familia, donde siempre encontramos un abrazo, una caricia, y donde
recordamos que está buenísimo divertirse. Ella es fuego, explosión, ÚNICA EN SU
ESPECIE.
Me encuentro en cada una de ustedes, a
veces más parecida a una, a veces más a otra, pero siempre en alguna. Hoy, este
2014, celebro tener un pedacito de cada una de ustedes conmigo. Las llevo a
todas partes, y quiero aprovechar como nos recomendó el Rabino de Nordelta en
Januca, a mirarlas a los ojos, a ustedes, mi abuela, mi tía y mi mamá, mi
familia, para decirles que LAS QUIERO MUCHO, y que le agradezco a la vida
tenerlas conmigo y poder disfrutar de cada una de esas cosas que las hacen ÚNICAS EN SU ESPECIE.
Feliz año nuevo!!!!!
Por muchos más llenos de historias,
emociones, anécdotas, pero por sobre todo, como deseo 2015: Más momentos juntas,
disfrutando de su compañía, para poder seguir conociéndolas y aprendiendo.
31-dic-2014
Sofía.
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